(Continuación del Congreso Latinoamericano
sobre Trata de Personas. III Modulo)
Fecha: 30 de junio.
Lugar: Colegio Don Bosco. Calle Chaneton 955. Neuquén capital.
Organiza: Dirección General
de Trata y Prostitución de la Subsecretaria de las Mujeres.
.
Exposición de Adriana
García
El
tema de mi exposición será:
Prostitución y
Violencia de Género
Cuerpos y subjetividades
en disputa
..hay dolores que han perdido la memoria y no
saben que son dolores”. Voces, Antonio Porchia
Elegir
este tema significa poner en palabras, las vivencias transitadas en diversos
espacios como capacitadora en cursos y talleres sobre prevención de
Violencia de Género, donde las personas asistentes, en un 98 % mujeres,
la mayoría de ellas profesionales de Trabajo Social, psicología social,
psicología, algunas personas de derecho, que venían por ese plus de formación, que no recibían en sus recorridos
educativos, en su búsquedas y en sus prácticas,
no relacionaban la prostitución, como una de las violencias hacia la
mujer, ante la enunciación del tema: prostitución y trata, manifestaban un
claro repudio ante la trata ( aunque
ésta mayoritariamente estaba asociada al secuestro), pero casi siempre aparecían dudas ante la Prostitución.
Acercarse al tema resultaba
difícil, podía observarse la falta de interpelación personal, o cierta
confusión ante la circulación dentro de algunos ámbitos académicos o de
formación formal e informal, de teorías que:
Apoyan
la existencia de una forma forzada y
otra “libre” de ejercer la prostitución,
Rechazan
la prostitución infantil pero sin
analizar que alli, la niñez És prostituída, siempre oculto el actor principal,
Avalan
la postura de legitimar el uso de la
violencia si hay “consenso”, o
sea que alguien: puede consentir
libremente su propia opresión o daño
Diferencian la
acción a puerta cerrada o en la calle,
Y
prostitución versus trata, sin decodificar
que la trata se constituye para satisfacer la demanda de prostitución, y que
existen mujeres tratadas, paradas en una
esquina,
Y la que
considera un trabajo como cualquier otro porque cada quien hace con sus
cuerpo lo que quiere, y el trabajo sexual..empodera a las mujeres.
La sexualidad está en la base de la
desigualdad de género, construyendo la identidad y la subjetividad, y que en la
prostitución ,no se compra un servicio sexual, sino a la mujer misma,
postularla como trabajo, oculta a una
clase dirigente que desde centrales de
trabajadores u otras organizaciones, reciben financiamiento del exterior por
parte del proxenetismo internacional y del negocio prostibulario del que forman
parte, para llevar a cabo acciones públicas, investigaciones, viajes, congresos, y para continuar convirtiendo en objetos, a
quienes por su extrema necesidad material
y/o simbólica, llegan a la prostitución como único o último recurso,
situación que ostenta en su base, la violencia de género, que construye una
categoría de mujeres, disponibles para la satisfacción de la sexualidad
masculina, convirtiéndola en mercancía, cuyo deseo y placer no tiene cabida,
evidenciando en todos los casos que esa violencia esta basada en la relación
jerárquica entre varones y mujeres. Eran evidentes además los prejuicios
y mitos basados en los
estereotipos
ES EL OFICIO MAS VIEJO DEL MUNDO
ES UNA FORMA SENCILLA DE GANAR PLATA
LO HACEN PORQUE LES GUSTA
LO HACEN DE FORMA VOLUNTARIA
LA PROSTITUCIÓN VIP NO ES LO MISMO QUE LA OTRA
LO HACEN PARA ALIMENTAR A SUS HIJO/AS
SI LA PROSTITUCIÓN NO EXISTIERA HABRIA MAS VIOLACIONES
LA MUJER ES LA QUE PROVOCA AL VARON
TODAS LAS MUJERES SON PUTAS
Mitos y prejuicios,
que justifican la opresión de los varones sobre las mujeres
y son naturalizados por la sociedad,
dificultando la reflexión personal y favoreciendo la desconexión entre prostitución- trata y violencia de género, siendo la explotación sexual de
mujeres, de niñas/os, de trans y travestis, su
expresión más terrible y
detestable.
Intentar entonces, desmontar estos
mitos que se asientan en siglos de dominación y poder percibir que la esclavitud
y el terrorismo sexual son unos de los
ejes del sistema patriarcal, era difícil...había que demostrarlo desde el
propio cuerpo, y así recordando, evocando, actuando, leyendo, el cuerpo hablaba
de viejos abusos y maltratos siempre presentes, de violaciones maritales ahora
con un nombre, más allá del amor con que hayan sido recibidos esas hijas o hijos , entendiéndolas como violencia,
enfermedades que gritaban abusos infantiles sin haber podido contarlos nunca,
y sentir que solo somos un cuerpo..un cuerpo
con memoria, un cuerpo donde todo acontece, un constructo social y tierra de nuestra
subjetividad.
Este trabajo con el cuerpo permitió poder
acercarse al cruce abuso, prostitución y
trata, abuso, un cuerpo siempre disponible para un otro,
que impone su sexualidad e imprime un modo de recibir afecto, que impone
reglas: el miedo , el secreto y la disociación necesaria, modos que se replicaran a lo largo de la vida en lo
relacional, si el trauma no es tratado como debe, se pudo evidenciar entonces el porque de las
estrategias del inexistente SAP ( Síndrome de alienación parental) usado como
defensa de abusadores y pedófilos..para lograr impunidad y dejar de investigar
casos de abuso infantil paternofilial, dejando nulos los esfuerzos de equipos
médicos.. peritos y sobre todo a las madres en la mas terrible soledad y
abandono y a niñes revinculados con sus padres abusadores, fue poder
vincular entonces , que la mayoría
de las mujeres en situación de prostitución fueron victimas de maltratos y
abusos en su infancia, con el silencio cómplice de la sociedad y todas la
revictimizaciones posibles, tuve ocasión de escuchar estos relatos en boca de
una “trabajadora sexual”, que se quebró al recordar su infancia, dejando a
quienes la habían invitado, a contar su glamorosa experiencia empoderante, sin
habla: ante ese quiebre inesperado, que
nos dicen a las claras las condiciones materiales y SIMBÓLICAS que las han
puesto en ese lugar, libre elección?? Elige libre la niña de 4 5 6 7 años
abusada, vendida o explotada cuando llega a los 18 y ya tiene cuasi un
destino? O cuando han sido vulnerados
los mas básicos derechos a la educación,
a la salud, a la vivienda, al trabajo, a la cultura, a la integridad física?..es
solo la Trata el problema?
“….la esclavitud sexual es uno de los fundamentos
de la sociedad patriarcal, por lo que su desaparición solo será efectiva cuando
sea abolido el orden social que la produce”
1 (HALL, 1998)
El problema
de la trata, es la prostitución, si no hay prostitución, no hay trata, ya que
ésta existe para reclutar mujeres, niñas / niños, personas trans, travestis a
veces hombres; para su violación sistemática, y para incrementar el negocio de
los traficantes, proxenetas, funcionarios, legisladores, empresarios, fiscales,
comisarios y jueces que participan del negocio.
La
prostitución es abuso, llevaría
tiempo hablar de las relaciones, abuso, prostitución y trata pero veremos
brevemente sus coincidencias: por ejemplo en
El SAP (síndrome de alienación parental, un
inexistente síndrome, es una estrategia judicial perversa que acusa a las
madres de “lavarles la cabeza” a sus hijos en contra de sus padres, capaces de
inventar actos tan horrendos como los que supone que un padre abuse sexualmente
de sus hija/os, estrategia que subestima la contundencia de las pruebas del
relato, o las de los dibujos de
esas niña/os, de los informes de los
cuerpos médicos que categóricamente determinan que esas niñas/os han sido
abusados por sus padres varones.
Así
el SAP se suele utilizar como argumento de defensa, de abusadores y pedófilos
para lograr su impunidad y no investigar uno de los delitos más aberrantes como
lo es el abuso sexual infantil paternofilial, desarticulando las redes de atención que
actuaron previamente y dejando a quienes operan en el tema, en la impotencia,
el burnout y el más extremo cansancio, entonces el cruce entre abuso prostitución y trata, podemos intuirlo por similar, al decir
que el abuso nada tiene que ver con las necesidades sexuales de un varón, (son
prácticamente 99% varones los perpetradores), padres, padrastros, abuelos,
tíos, padrinos, amigos de la familia o hermanos mayores, y que aquellos que
acosan, abusan o atacan sexualmente a su hija o hijo (aunque en menor medida,
los niños son también abusados) solo lo
hacen por “poder” esa sensación es
la que los excita, la inermidad o
la vulnerabilidad de la víctima.
Puede
decirse casi sin error, que la mayoría de las mujeres en situación de prostitución, han sufrido abusos y maltratos
en la infancia, transitados por el silencio
culposo o cómplice, la impunidad y todas las revictimizaciones posibles.
“Como si en la infancia no estuvieran ocultas
las raíces de toda la vida”
Alice Miller –El drama del niño dotado
Quienes transitamos por espacios que
trabajan con temas de violencia y abuso, sabemos que la palabra prostituta y
puta forman parte del discurso del violento y están presentes durante los castigos, correcciones, humillaciones y
en la máxima expresión: el femicidio. Sobre este tema pueden dar fe los equipos
como la Oficina de Violencia Domestica o aquellos que reciben las denuncias
ante violencia de género.. hace pocos dias, se halló el cuerpo
de una mujer que era buscada intensamente,
descuartizado, y en su espalda, grabada a cuchillo la palabra PUTA..por
todo esto es que podemos ver que la prostitución es un problema teórico,
político y ético..
“………..Mientras cursaba
la escuela secundaria visité por primera vez, junto con una profesora y un
grupo de compañeras, el hospicio de mujeres de Lomas de Zamora. En un momento
dado, me entretuve hablando con algunas de las internas y, cuando quise volver
a reunirme con mi grupo, ellas me señalaron un
atajo.
Así me encontré atravesando lo que después supe era el pabellón de mujeres que
habían estado en situación de prostitución. Me llamó la atención la gran
cantidad de mujeres que había en ese pabellón. Cuando le pregunté al Director
por qué esa cantidad me contestó “Son muchas por las cosas que les hicieron y
las que les hicieron hacer”
En ese
momento fui testigo del costo de esa forma de vida. Lo innegable era la
destrucción que para estas mujeres había significado. También me pareció
innegable su padecimiento. Fue a partir de tal circunstancia que se me impuso
un interrogante: ¿Qué acontecimientos pudieron producir un daño tan profundo
como extenso?
Lic. Magdalena
González –
Hablamos de la profunda desigualdad entre los
sexos, sosteniendo al sujeto social que ha creado el patriarcado, que coloca a
las mujeres en el lugar de un objeto de menor valor, y también para ser
consumido, hablar de prostitución es
acercarnos a una problemática sumamente
compleja y de difícil abordaje, que debe ser observada bajo diversos aspectos:
imaginarios sociales, condiciones materiales y subjetivas, sistemas jurídicos,
Derechos Humanos de las humanas, restitución de los mismos a las personas en
situación de vulnerabilidad, las enormes ganancias económicas derivadas del
negocio de la pornografía, del turismo sexual, de la misma explotación de
mujeres y niña/os y de cómo, se
agigantan éstas en el empalme devastador entre capitalismo y patriarcado
..“Bajo formas cambiantes según tiempo y
lugar, las mujeres han sido consideradas seres cuya humanidad es problemática
(más peligrosa o menos capaz) en comparación con la de los hombres. A la
dominación sexual que este prejuicio genera la llamamos patriarcado y al
sentido común que lo alimenta y reproduce, cultura patriarcal
3
Boaventura
de Sousa Santos
En
su artículo 1º, la Declaración de las
Naciones Unidas sobre la Eliminación de la Violencia contra las Mujeres, durante la Conferencia Mundial de los
Derechos Humanos celebrada en Viena en 1993, y en la Conferencia de Pekín, la
violencia de género fue definida como "cualquier acto de violencia basado en
el sexo que dé lugar o pueda dar lugar a un perjuicio o sufrimiento físico,
sexual o psicológico de las mujeres, incluidas las amenazas de tales actos, la
coerción o las privaciones arbitrarias de libertad, ya ocurran en la vida
pública o en la privada".
“Las mujeres en situación de
prostitución son el grupo de mujeres que sufre las mayores violaciones y los
niveles más altos de violencia en todo el mundo. La relación entre los
proxenetas y las mujeres en prostitución es muy similar a la que tienen las
mujeres víctimas de violencia en el ámbito familiar y sus victimarios. A veces
están encerradas por la fuerza en los burdeles, encarceladas, con los
proxenetas. Claro que es un problema de violencia contra las mujeres. Se puede
pensar en que es un trabajo si se olvida que hay una relación desigual entre
esos hombres y las mujeres; hay fuerza física de por medio, con golpes y con
armas, y también hay otras formas de violencia asociadas, la pobreza, el racismo,
la edad.” 4Catherine A. MacKinnon
La situación de la mujer prostituída,
es muy parecida a la de una mujer maltratada, víctima de
violencia de género.
Al igual que ella, generalmente no denuncia,
aguanta por miedo, por falta de alternativas laborales reales, por tener una
subjetividad arrasada, por formas sutiles o brutales de coerción no siempre
demostrables, por falta de recursos sociales y económicos y por el estigma
social que recae sobre ella.
Otro motivo a sumar para su permanencia junto
al maltratador o proxeneta es el daño que genera la misma violencia, llamado ”
Estrés Post Traumático COMPLEJO” , por la psiquiatra Judith Lewis Herman, que con esta aportación ha puesto
las bases, para la consideración diagnóstica oficial en psiquiatría, de las
secuelas del trauma interpersonal prolongado y repetido, que incapacita a las
víctimas para salir de la violencia, al crearse un vínculo traumático con el
maltratador o el proxeneta que confunden con amor.
.
A causa del sometimiento a un control
totalitario personal del que no se puede escapar durante un tiempo prolongado,
se produce una adaptación al control y al maltrato. Algunas de sus
características son por ejemplo:
-Ansiedad: conducta sumisa
-Olvido de los acontecimientos traumáticos más graves,
o minimizarlos
-Indefensión o parálisis de
iniciativa, permanente tristeza, culpa, desesperanza
-Profunda soledad, creencia de que
ninguna otra persona puede comprenderla
-Preocupación por que el maltratador
sufra algún daño
-Idealización del maltratador,
gratitud paradójica hacia él
-Sensación de mantener con él una
relación especial (amor). Aceptación de su sistema de creencias o
racionalizaciones Desconfianza persistente de otras personas, aislamiento
-Fallos repetidos de autoprotección; revictimización;
búsqueda repetida de un rescatador
-Somatizaciones
Podemos observar que la mayoría de
estos criterios se corresponden con la expresión “Síndrome de Estocolmo” el mismo es un
término descriptivo para un patrón, de que hacer, frente a una situación
traumática, en lugar de una categoría diagnóstica. La mayoría de los
psiquiatras utilizan los criterios diagnósticos para el trastorno de estrés
agudo o trastorno de estrés postraumático en la evaluación de una persona con
síndrome de Estocolmo.
5 Herman, explica como el diagnóstico
de Estrés Post Traumático (simple, no complejo), es insuficiente para describir
el estado de las mujeres prostituídas:
“La diagnosis de Estrés Post Traumático
requiere un estresor externo, implicando claramente que los síntomas
psicológicos resultan de condiciones materiales que oprimen a la mujer. Sin
embargo este diagnóstico por sí solo, no articula completamente la extensión
del daño psicológico causado por la prostitución. Con el tiempo, la permanente
violencia de la prostitución, la humillación constante, la indignidad que
representa y la misoginia social, provocan cambios en la personalidad”. Explica
así la necesidad del concepto diagnóstico Estrés Post Traumático COMPLEJO.”
La
violencia genera por lo tanto, una situación de indefensión aprendida que
incapacita a la víctima para escapar; el mismo sistema perverso de la
prostitución transforma a la víctima en una esclava sumisa.
Como
se podrá observar la violencia forma
parte ineludible del mundo de la prostitución, violencia física, maltrato
psicológico y emocional, y otras derivadas: violadas por fiolos y proxenetas,
violadas durante el ejercicio de la actividad o por fuerzas de seguridad, etc
Este no denunciar ¿significa que acuerdan con
el maltrato, o lo consienten?
¿Deberían despenalizarse estas
violencias, porque las víctimas no se van y parecen dar su consentimiento?
Sabida es la respuesta más común ante la violencia de género, si no se va: es….
porque le gusta
.
. Reconocer
que la prostitución es una violencia no acabará con la prostitución al igual
que la visualización de la violencia en la pareja no ha acabado con ella, pero
nombrarla como violencia impedirá que los prostituidores se escuden detrás del
consentimiento de la persona prostituida, al igual que actualmente no se
permite que los maltratadores se escuden en que su mujer no los deja ni los
denuncia 11 Mackinnon. Catherine.
Haber acompañado y acompañar los
recorridos de las luchas de las compañeras de AMADH Asociación de Mujeres
Argentinas por los DDHH (desprendimiento de quienes postulan la prostitución
como trabajo, mientras ellas la consideran la máxima expresión de violencia), relatando que, durante sus trabajos de
sensibilización tanto en Capital como en el Interior del país, lo único que demandan la compañeras en la
calle es algún modo de salir de la prostitución, un trabajo que las aleje de la
explotación, y les permita recuperar la dignidad.
.AMADH que ha apostado a la educación
y al trabajo, a permitido con sus gestiones y proyectos, la primera promoción
de mujeres electricistas, varios cortometrajes con premios internacionales, biblioteca,
revista Mujeres con Voz talleres de fotografía, serigrafía,
obras teatrales, mujeres tamboras,
grupos de promotoras territoriales de salud, y una permanente
lucha mediante proyectos de ley,
para derogar todos los códigos contravencionales que penalizan a las
personas en situación de vulnerabilidad.
Cuentan además con un centro
Educativo, que ya va por la cuarta promoción de mujeres que han iniciado y
terminado su recorrido por la escuela primaria, esta brecha material, ¿puede
haber dejado libertad de elección a esa
mujeres en situación de prostitución, mujeres que no sabían leer ni escribir,
algunas de más de 60 años y aún paradas
en la calle?
Realmente, a quienes promueven y
legitiman lo contrario, dentro de espacios académicos sobre todo, les sugiero
vehementemente, que pongan su cuerpo con todos sus agujeros en una esquina,
durante un mes, para ver si ratifican la
teoría del derecho a consentir, la propia opresión.
Volviendo al reclamo de las mujeres,
si bien es verdad, que se ha avanzado, con diferentes programas*, que permiten
allanar prostíbulos y rescatar mujeres explotadas, y concientizar, aún nos
encontramos a nivel federal, con pocos recursos genuinos, que permitan la
larguísima etapa de transición, que estas mujeres necesitan para reparar las condiciones subjetivas y
materiales por lo vivido, acciones que deben sostenerse por un tiempo prolongado y con seguimiento de
las mismas, para evitar un reingreso al circuito de explotación,
revictimizadas, se trata de restablecer
una salud deteriorada por el paso de los años y el sufrimiento corporal, hasta
la restitución de todos los derechos vulnerados, y la reparación económica
necesaria, para ellas y sus familias, las que quedaban desamparadas con los
largos períodos de cárcel que sufrían, violencia vicaria, llamaríamos a la de
sus hijas e hijos.
Hasta aquí brevemente,( ya que este trabajo no
puede agotar la cantidad de instancias que intervienen,) hemos estado hablando
del ingreso, daño, consentimiento y / o permanencia de las mujeres en la
prostitución, cuando… la verdadera pregunta es:
Porque
tantos varones compran cuerpos de mujeres y niñas para satisfacer su devaluada
sexualidad?
Si bien es cierto que son los
proxenetas y los tratantes quienes se benefician con este negocio, gracias a la connivencia de
varios actores, jueces, policía estados, medios de comunicación, nadie ofrece
lo que no tiene demanda, y la misma se genera en este círculo poco virtuoso
donde los pactos patriarcales, hacen del CLIENTE y el proxeneta, socios para la ejecución de la misma
violencia.
¿Es una entelequia el cliente?,
es el eterno desconocido, en todos los
allanamientos a prostíbulos mostrados por los medios, son solo las mujeres quienes aparecen, pues
démosle entidad, los CLIENTES son: nuestros padres, hijos, hermanos, esposos,
amantes, compañeros de trabajo, dentistas, médicos, jueces, profesores,
carniceros, productores, locutores, recicladores, compañeros de militancia, y
todos los etc. que quieran agregar, como también son ellos, los consumidores de las personas transexuales
y travestis a quienes buscan con sus autos en las llamadas zonas rojas, para no
ofender en sus lugares las buenas costumbres, luego de saludar y arropar a su
prole y besar a sus mujeres.
Los
prostituyentes, demandan cada vez mujeres más jóvenes, extranjeras,
exóticas, niñas pequeñas, discapacitadxs, hasta bebes, y con su dinero
financian la trata de personas para la prostitución.
En su mayoría
desprecian a las mujeres que “compran”
por pocos pesos o muchos euros o dólares.
El prostituyente, obtiene así una representación escenificada o no, del poder de género que tiene sobre esa
persona que prostituye, reconstruyendo
en cada acto su virilidad, su devaluada sexualidad, que se basa en la sumisión
y acatamiento a su deseo, por parte de la persona prostituída, aumentando la
imagen de sí mismo, al reforzar su machismo
Dado que el sistema prostituyente es
sistémico, y no es fácil tocar sus variables en forma aislada, es imperioso
visibilizar al cliente- prostituyente, sancionarlo socialmente, educarlo, dentro del ámbito familiar, el educativo, en
los medios de comunicación, etc. iniciando una cultura de la equidad, ya que
sin esa sanción social, los problemas se perpetúan y cronifican.
.
7Carole Paterman explica la violencia hacia
las mujeres a través de lo que denominó el contrato sexual (1988). La pensadora
australiana sostuvo que la desigualdad entre los sexos (salarios más bajos,
violencia de género, acoso sexual, violación, comentarios sexistas, falta de
reconocimiento social, etcétera) es un producto de la especial reorganización
patriarcal de la Modernidad.
El contrato sexual (entre hombres) es
el medio a través del que se instituyen, al tiempo que se ocultan, las
relaciones de subordinación en el patriarcado moderno, insistiendo en desmontar
la idea de que las mujeres son personas dueñas de sí mismas, y apuntando que se trata
de una ficción de la sociedad
patriarcal, cuyo contrato sexual básico,
no explícito, es que los varones
tienen asegurado el acceso al cuerpo de las mujeres, y parte esencial de ese
derecho es su demanda de uso de cuerpos
de mujeres como mercancía.
.La prostitución se haya inscripta en
las relaciones de opresión patriarcales, que colocan a los varones del lado del
dominio y a las mujeres de la sujeción, a la vez, los varones tienen entre sí
relaciones sociales jerárquicas, por clase, etnia, religión, edad, etc., pero
al mismo tiempo se unen y solidarizan para compartir la dominación sobre las
mujeres, estos privilegios cuando son aprovechados de forma natural, son el
caldo de cultivo para la violencia de género.
La base de la cultura patriarcal es la desigualdad y como toda otra desigualdad,
hace uso de la violencia material y simbólica, para sostenerse, dominar,
disciplinar y reproducirse.
Estas
asimetrías de poder se encuentran presentes
en todos los niveles de la organización social, incluida la familia. Así es como la violación sexual,
como actitud dominante masculina posiciona a los varones como
sujetos de propiedad. El racismo y el etnocidio
son otras dominaciones que se vinculan a las violaciones sexuales.
Brevemente,
solo algunos detalles sobre la violencia sexual en los conflictos armados;
“La violencia sexual en los conflictos
armados tienen varias formas: violaciones sexuales masivas y múltiples por vía
vaginal, anal y oral, mutilación de órgano sexuales, mutilación de fetos de
mujeres embarazadas, actos humillantes como hacerlas bailar o desfilar desnudas
ente soldados y otros actores armados, esclavitud sexual en las que las mujeres
además de servicios sexuales desarrollan labores domésticas, embarazos
forzados, códigos de conducta, entre otros “8(Montes, 2006).
Víctimas sospechosas
La
cuestión del no reconocimiento de la gravedad de los delitos contra la
integridad sexual, se suma al hecho de que sus víctimas son particularmente
reacias a denunciarlos puesto que la denuncia hecha con el objetivo de lograr
justicia las lleva al ostracismo social en sus comunidades. Donde quiera se las
haya relevado - Corea, Balcanes, Ruanda, América Central y del Sur - las
víctimas de violencia sexual pasan por un doble calvario: las violaciones, y el
subsiguiente repudio por parte de su familia y su comunidad, para las cuales
son culpables del crimen que padecieron. El ostracismo social y la consiguiente
dificultad para denunciar estos crímenes son propios de los casos individuales
de violaciones y violencias sexuales en la vida cotidiana, y se prolonga en los
casos en que esas violencias se producen en el contexto de conflictos y
enfrentamientos armados, y de represión. 9Grietas en el silencio.2011
introducción Marta Vasallo
Esta
situación fomenta una socialización de la sexualidad basada en la dominación
del cuerpo de la mujer, juguete o
incubadora, pero siempre con dueño, desapareciendo el propio deseo, en función
del placer y del bienestar de ese otro dominante.
Pornografía o la
industria de la violación
Es muy complicado hablar de pornografía,
es un tema cuasi vedado sobre todo en espacios académicos. El mal llamado
material erótico degrada y explota a las mujeres y niña/os que son utilizadas
en esa filmaciones o gráficas, que serán reproducidas a través del tiempo sin
ningún control, y porque llamarla
industria de la violación?, existen diversas industrias algunas legales y otras
ilegales, todas dejan cuantiosas ganancias, y para no perderlas se inventan
guerras y terrorismos varios, pasa con
las armas , el petróleo, las drogas, el tráfico de personas para explotación
sexual, si se invierte dinero, y si tanto dinero reporta, los intentos de no
perder el negocio es obvio, la pornografía es la gran aliada de la trata, hoy
en día es más grande que la de Hollywood, la pornografía es la teoría, la prostitución, la práctica, las viejas
revistas Playboy, son cuasi Heidi a lo que significa el porno hoy, visto y
replicado casi en su mayoría por varones, en el porno se ven mujeres siempre
dispuestas a ser penetradas, humilladas, maltratadas, todo les gusta, a nada
dicen que no, cómo, un niño o niña que ya desde los 10 u 11 años miran estas
prácticas, ya que sus familias no tienen modo de controlar donde entran con sus
tablet o celulares, lejos quedó el tiempo del filtro en la computadora, decía,
como entienden que un no, es no, si han visto reiteradamente como se debe
comportar una mujer y un varón durante sus relaciones sexuales, ni el ESI
servirá para esto, si no nos apuramos.
Las situaciones permanentes de incesto
que propone desde los llamativos títulos, “jugando con papi”, la bebe del tío,
“ educando a mi hijastra” etc, aunque la llamen fantasía, son francas acciones
pedagógicas, puede demostrarlo el crecimiento exponencial de los abusos, y la
violencia y la “creatividad” en los femicidios. Una gran cultura de la
violación.
Las redes que prostituyen a la niñez
son globales, instituciones religiosas, con curas abusadores, encubiertos por
el mismo Vaticano que los mueve a través de los países, para seguir abusando,
por ejemplo a niñas y niños con hipoacusia,
como el caso del cura Corradi en el instituto Próvolo de Italia a
Mendoza y la Plata en primera clase, esas redes: violan, prostituyen y graban pornografía.
Si acordamos que, casi de
modo general, nadie acepta la
pornografía infantil, aunque existe y es unos de los ejes de la pedofilia, en
realidad de la pederastía, hay a lo largo del mundo 10.000 niña/os
desaparecidos durante las últimas inmigraciones a Europa, y hay más de 9.000
niñes desaparecidos solo en Alemania, que nadie sabe donde estan, producto de las guerras que azotan el mundo
árabe y la devastación en Africa, o las niñas abandonadas en los orfanatos de
China quienes las adoptan y para que.. no se sabe cuanta será la niñez
“perdida” para explotación sexual y tráfico de órganos, pero a pesar de esto,
nadie reivindica la pornografía infantil, en cambio no hay acuerdo en el caso
de las mujeres, que se considera, forma
parte de un trabajo de actriz o de modelo, y si bien alguna mujer en
prostitución la elige como modo de vida, no se diferencia de la prostitución,
ya que en pornografía o en prostitución, se configura la misma explotación.
.
La pornografía degrada y explota a
todas las mujeres, ya que cuando el cuerpo femenino se convierte en un objeto,
todas las mujeres quedan reducidas a ser destinadas a la gratificación sexual
del varón, para satisfacer sus supuestas
necesidades, de un modo impersonal y sin la mediación del amor, pero que, luego
de estas sesiones de excitación mediática, las propias parejas son las
utilizadas como medio de experimentación de posturas o acciones degradantes,
que han sido vistas en el material gráfico o en video, además posiciona a las mujeres a la categoría
de un depósito, en el que su compañero, “se alivia” luego de excitarse con las
imágenes de otros cuerpos, o parte de ellos.
Si bien la pornografía hegemónica es
terriblemente violenta, la mayor parte del porno no se comparte en sitios
oficiales, sino en la dark web, la dark o deep web es la red de Internet más
grande, extensa y “controlada” y de tan fácil acceso que ni deja rastro de
quien accede a ella, ni su ip, ni datos de usuario, se puede comprar con moneda
virtual, armas, drogas, personas, pornografía, órganos, etc. El porno en la
dark web es mayoritariamente abuso infantil, niñas niños pequeños, bebés, que a
veces mueren durante las filmaciones, eso se filma, eso se vende, eso se busca,
eso se compra, estos videos y filmes pornográficos con tan altísima carga de
violencia, son los llamados snuff, que además de la tortura, culminan con la
muerte real de la protagonista, un
delito horrendo que se sigue practicando…y demandando. Interpelémonos ante
tanta niñez perdida y que pasara con tantos vientres subrogados, y con la mente de esos
usuarios.
En definitiva deberemos prestar mucha
atención, no solo las marchas ni los reclamos públicos harán la tarea.
Decía George Orwell Quien controla los medios controla el mundo
En el heteropatriarcado
capitalista y la globalización de los mercados, el cuerpo, o partes de él, son
un producto más a consumir, la sexualidad se mercantiliza, cuerpos sexuados son
presentados en las publicidades y en la mayoría de la prensa gráfica con una
exhibición llamada “erótica”, convirtiéndose en una permanente escuela de
prostitución, para todas las mujeres de
todas las clases sociales, grupos de edad y nivel educativo El
poder hegemónico del imaginario prostituidor toma cuerpo y se evidencia también
por medio del lenguaje, que nunca es neutral.
“Las prácticas significativas de la
vida cotidiana son el lugar donde la identidad se constituye como forma de
representación en la que es fundamental el lenguaje. Por lo tanto, las
identidades son construcciones discursivas formadas
y /o reguladas por el discurso; de
hecho, no puede haber identidad, experiencia o práctica social que no esté
construida discursivamente, puesto que no
podemos sustraernos del lenguaje.”*
Lenguaje sexista, ficciones altamente
pedagógicas, que naturalizan los estereotipos,
discriminación, misoginia, intercaladas con situaciones hilarantes y
localismos, que evitan analizar críticamente ese lugar otorgado por los medios
a las mujeres, limpiando, cocinando, atendiendo, cuidando, perfumando, alegremente sometida, la
madre-esposa, siempre disponible,
o su contratara, mujer-objeto al servicio del varón, siempre disponible y
validada por ser deseada, todo regado con una gran cantidad de amor romántico y
violencia.
Esta situación fomenta una socialización de la
sexualidad basada en la dominación del
cuerpo de la mujer, juguete o incubadora, pero siempre con dueño,
desapareciendo el propio deseo, en función del placer y del bienestar de ese
otro dominante, debemos acabar con el sexismo desde nuestros lugares
cotidianos, descolonicemos la sexualidad
falocéntrica, heterosexual, y violenta donde se somete o se es sometida.
De
no trabajar fuertemente por el fin del sistema prostituyente, no solo se habrá
perdido la batalla contra la trata, sino también contra la Violencia hacia las
mujeres.
Por ello quienes formamos parte de la Campaña
Abolicionista Ni una mujer Más victima de la redes de prostitución- otros
grupos Abolicionistas que activan a lo ancho y largo de nuestro pais, seguiremos
luchando por la emancipación de la mujer, por la abolición de un estado
patriarcal o sea……por el fin de la esclavitud
sexual